Entrevistamos a Cecilia Jiménez Mantilla, una mujer de 83 años que ha descubierto la Marcha Nórdica hace unos años y ha sido una apasionada practicante desde entonces. Conoceremos cómo la Marcha Nórdica ha influido en su estado físico y mental y qué consejos le daría a alguien que quiera empezar a practicar la Marcha Nórdica a una edad avanzada.
¿Cuál es tu nombre?
Cecilia Jiménez Mantilla
¿De dónde eres?
Nací en Bucaramanga (Santander, Colombia) hace 83 años.
¿Cómo descubriste la Marcha Nórdica y por qué decidiste empezar a practicarla?
Mi Padre Médico, Cirujano y Radiólogo, era alto y ágil, estudiando la Medicina, ya practicaba salto de Garrocha, fue Campeón en su categoría y nos inculcó desde muy temprano los beneficios del ejercicio. Somos 9 hermanos, a los hombres el Tenis y el Futbol, a las mujeres Ballet y Natación; yo he practicado las dos. Conocí la “Marcha Nórdica” por intermediación de una amiga que me invito a la primera marcha en el parque del Marjal.
Desde ese día decidí seguir participando porque me agradaron el ejercicio y el maravilloso grupo que encontré, la escuela Nordikplus.
Con mi Marido caminamos en las tardes y fines de Semana. En todas las ciudades lo he podido hacer, excepto en Jeddah, ARABIA SAUDITA, donde las mujeres sólo pueden salir acompañadas por un hombre de la familia.
¿Cómo la Marcha Nórdica ha impactado en tu salud y estado físico?
La marcha ha contribuido a mantenerme en buena salud y a mejorar mi estado físico, desde que comencé a caminar con los bastones, he notado una gran diferencia en mi estado físico y mental.
¿Ha mejorado tu energía, fuerza o bienestar general?
Puedo asegurar que La MARCHA NORDICA hoy en día, ha hecho CRECER mis energías, puedo continuar después de una buena ducha , con mis actividades diarias y mis compromisos y es mas, caminar algunas tardes. ME HA HECHO SENTIR MAS JÓVEN .
ASÍ QUE RECOMIENDO practicar esta actividad, empezando a un ritmo suave y corto, que va creciendo a medida que se practica.
¿Qué sitios para ti son los mejores para hacer Marcha Nórdica en tu
localidad?
La playa de San Juan es uno de mis lugares favoritos para hacer Marcha Nórdica. Me encanta caminar por la orilla del mar mientras siento la brisa fresca en mi rostro. Además, es un lugar muy amplio y cómodo para caminar con los bastones. La suave arena de la playa ofrece una superficie perfecta para la práctica de la Marcha Nórdica, lo que hace que el ejercicio sea más suave y seguro para mis articulaciones.
También me gusta caminar por la avenida de Miriam Blasco, ya que es una zona muy tranquila y arbolada que ofrece un entorno agradable y natural para caminar. La sombra de los árboles me protege del sol y el suelo es muy cómodo para caminar con los bastones. En definitiva, estos dos lugares son los mejores sitios para hacer Marcha Nórdica en mi localidad, ya que me permiten disfrutar de un ejercicio saludable en un entorno natural y cómodo.
¿Alguna costumbre antes de un entrenamiento?
Antes de empezar un entrenamiento de Marcha Nórdica, me aseguro de hacer un calentamiento adecuado para preparar mi cuerpo para el ejercicio. Normalmente, sigo las pautas dadas por los instructores que he tenido a lo largo del tiempo, quienes me han enseñado diferentes ejercicios de estiramiento y movilización articular para calentar los músculos y las articulaciones.
Hacer un calentamiento adecuado es una parte importante de mi rutina de entrenamiento de Marcha Nórdica, y me ayuda a preparar mi cuerpo y mi mente para disfrutar al máximo del ejercicio.
¿Qué te motiva a seguir practicando la Marcha Nórdica a tus 83 años?
Me motivan mi bienestar físico y la agradable compañía de quienes participamos en esta actividad. Involucrarme en una actividad física sana e integrarme a grupos amables de caminantes presididos por buenos instructores.
¿Qué consejo le darías a alguien que quiere empezar a practicar la Marcha Nórdica a una edad avanzada?
Si alguien quiere empezar a practicar la Marcha Nórdica a una edad avanzada, mi consejo principal sería que elijan un buen grupo de entrenamiento. Es importante que el grupo sea flexible y esté integrado por personas que entiendan las limitaciones propias de la edad, y que estén dispuestas a adaptar el entrenamiento según las necesidades individuales.
Además, es fundamental que el grupo de entrenamiento cuente con instructores de Marcha Nórdica capacitados y experimentados en la enseñanza de la Marcha Nórdica para personas mayores. Estos instructores pueden ayudar a los principiantes a aprender la técnica adecuada y a adaptar el ejercicio a su nivel de condición física y capacidad.
¿Qué ha significado la Marcha Nórdica para ti?
Una mejoría general en la condición de mi salud que se ha traducido en una reducción en la frecuencia de mis visitas al medico.
¿Quieres decir algo más?
He apreciado mucho la solidaridad de mi grupo y la de mi instructor cuando he necesitado ayuda.
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